La Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC) alerta que el departamento atraviesa un proceso de aislamiento por los bloqueos registrados en las principales vías de conexión interdepartamental, provocando daños irreversibles a la economía regional, a las familias cochabambinas y generando una afectación acumulada de 268 millones de bolivianos al aparato productivo y de servicios durante nueve días de bloqueo atravesados en lo que va de 2024, informó en un comunicado.
En dicho documento indica que durante los últimos dos días, se registró una afectación de 153 millones de bolivianos al sector privado de la región como consecuencia de la interrupción del tránsito en las carreteras nuevas y antigua al oriente y al occidente.
Las posiciones radicales de los sectores movilizados y la falta de acciones inmediatas de las autoridades competentes para resolver las problemáticas de fondo que originaron los bloqueos, generan cuantiosas pérdidas económicas al sector empresarial formalmente establecido, que repercutirán en la economía de los cochabambinos aún durante las próximas semanas y meses.
Bloquear Cochabamba significa entorpecer el desarrollo del país porque nuestro departamento ejerce un rol articulador de distribución estratégico, al conectar al oriente y occidente con los principales mercados de exportación para la industria nacional, pero también con los puertos más relevantes de importación de materias primas y productos complementarios.
De continuar la interrupción terrestre de las principales vías de conexión interdepartamental e internacional, se pone en riesgo las exportaciones de Bolivia. Advertimos que las empresas privadas deben asumir recargos por la mora de entrega, almacenamiento en los distintos puertos y en consecuencia se provoca un incremento en el transporte de mercadería que se ve reflejado en el precio del producto final al consumidor.
Al promediar el segundo día de bloqueos, el sector privado boliviano ha recibido una afectación directa de 662 millones de bolivianos.
Responsabilizamos a quienes atentan contra la libre circulación de las severas consecuencias para la iniciativa privada y la población. Asimismo, instamos a las autoridades llamadas por ley a activar los mecanismos correspondientes para atender las demandas sociales de los sectores movilizados.
Un departamento que es víctima de constantes bloqueos no es atractivo para las inversiones privadas, y por lo tanto, limita el progreso y desarrollo que nuestra región requiere.
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